En la construcción del ajuste y convalidación del Plan de Desarrollo Local de la Comuna 12- La América de Medellín, se han tomado diferente fuentes de información, primarias y secundarias, definidas las primeras en talleres de convalidación y ajuste, y la segundas en el levantamiento de información de tipo estadístico, especialmente de la encuesta de Calidad de Vida de Medellín - 2007, de donde se tuvo como pretensión conocer a través del dato cuantitativo la situación actual de la Comuna 12 – La América; tan cerca de la realidad como sea posible, haciendo uso de herramientas de interpretación de la información misma, cruzándola con información de fuentes primarias levantada en los talleres participativos.
La Encuesta de Calidad de Vida es un intento de la Administración Municipal por medir las condiciones de vida de los habitantes de la ciudad, utilizado herramientas de modelación estadística. Así, esta encuesta ofrece información desagregada de tipo demográfico, económico, físico-espacial, entre otras, brindado una acercamiento a la realidad de la ciudad.
La construcción del ICV tiene como base conceptual la teoría de la medición del estándar de vida, y en su construcción se usaron técnicas estadísticas que permitieran emplear de manera óptima las variables cualitativas y cuantitativas usadas, de forma tal que el ICV tuviera máxima información de ellas. En los procedimientos empleados se encuentran circunscritas las técnicas de cuantificación óptima y el análisis no lineal de componentes principales.
El objetivo de la Encuesta de Calidad de Vida es analizar la evolución de las condiciones de la ciudad y determinar si han cambiando significativamente las ponderaciones de las distintas variables que componen el ICV.
La elaboración de un indicador de las condiciones de vida de los individuos, es en general, un problema complejo, “Incorporar en el análisis empírico los aspectos que la teoría considera deseables, depende no sólo de tener claridad sobre los objetivos, sino de contar con los instrumentos adecuados para hacerlo y de la información necesaria para describirlos”.
La medición de la pobreza busca captar con especial énfasis las características de la población con menores niveles de bienestar, independiente de si se consideran solamente el espacio de los bienes primarios, los recursos y el ingreso; o de si se integran las dimensiones de libertad, derechos y posibilidades. En las dos formas tradicionales de medición usadas en Colombia, está implícita la consideración de que el bienestar se logra con la satisfacción de un conjunto de necesidades que, desde algún presupuesto teórico, se toman como básicas.
Identificar la pobreza es identificar el conjunto de personas o regiones que están en el subconjunto inferior dentro de un conjunto ordenado por las características que se han definido como deseables.
La medida de pobreza más común utilizada en Colombia desde 1986 ha sido la de Necesidades Básicas Insatisfechas NBI, que se puede considerar como un índice que capta principalmente condiciones de desarrollo de infraestructura urbana.
La otra forma utilizada en Colombia para medir pobreza es la llamada línea de indigencia o línea de pobreza[5], estimación que se realizó con base en la Encuesta de Ingresos y Gastos de 1984 y no ha sido modificada desde entonces.
La Encuesta de Calidad de Vida es un intento de la Administración Municipal por medir las condiciones de vida de los habitantes de la ciudad, utilizado herramientas de modelación estadística. Así, esta encuesta ofrece información desagregada de tipo demográfico, económico, físico-espacial, entre otras, brindado una acercamiento a la realidad de la ciudad.
La construcción del ICV tiene como base conceptual la teoría de la medición del estándar de vida, y en su construcción se usaron técnicas estadísticas que permitieran emplear de manera óptima las variables cualitativas y cuantitativas usadas, de forma tal que el ICV tuviera máxima información de ellas. En los procedimientos empleados se encuentran circunscritas las técnicas de cuantificación óptima y el análisis no lineal de componentes principales.
El objetivo de la Encuesta de Calidad de Vida es analizar la evolución de las condiciones de la ciudad y determinar si han cambiando significativamente las ponderaciones de las distintas variables que componen el ICV.
La elaboración de un indicador de las condiciones de vida de los individuos, es en general, un problema complejo, “Incorporar en el análisis empírico los aspectos que la teoría considera deseables, depende no sólo de tener claridad sobre los objetivos, sino de contar con los instrumentos adecuados para hacerlo y de la información necesaria para describirlos”.
La medición de la pobreza busca captar con especial énfasis las características de la población con menores niveles de bienestar, independiente de si se consideran solamente el espacio de los bienes primarios, los recursos y el ingreso; o de si se integran las dimensiones de libertad, derechos y posibilidades. En las dos formas tradicionales de medición usadas en Colombia, está implícita la consideración de que el bienestar se logra con la satisfacción de un conjunto de necesidades que, desde algún presupuesto teórico, se toman como básicas.
Identificar la pobreza es identificar el conjunto de personas o regiones que están en el subconjunto inferior dentro de un conjunto ordenado por las características que se han definido como deseables.
La medida de pobreza más común utilizada en Colombia desde 1986 ha sido la de Necesidades Básicas Insatisfechas NBI, que se puede considerar como un índice que capta principalmente condiciones de desarrollo de infraestructura urbana.
La otra forma utilizada en Colombia para medir pobreza es la llamada línea de indigencia o línea de pobreza[5], estimación que se realizó con base en la Encuesta de Ingresos y Gastos de 1984 y no ha sido modificada desde entonces.
La pobreza se considera entonces como fallas en la “capacidad efectiva” para lograr un estándar de vida, lo que constituye la verdadera privación o exclusión social.
En la actual coyuntura colombiana hay que agregar un desafío adicional en los intentos por obtener un estándar de vida, la incorporación de variables tan relevantes y difíciles de medir como la paz, la justicia y el capital social. Estas dimensiones, si bien están relacionadas con el ingreso, no son medibles directamente a través del ingreso personal.
En la Comuna 12 – La America se ha venido incrementando el Índice de Calidad de Vida (ICV), a diferencia del año 2005, donde se visualiza una variación negativa del -0,42% por debajo del referente de ciudad cómo lo muestra la tabla Nº. 4; de igual forma los porcentajes de la Comuna 12 – La América, año tras año reflejan, que están por encima de los índices del municipio, lo que indica el incremento y mejoramiento de la calidad de vida de la comuna toda vez que como se muestra en los datos esta comuna viene presentando un crecimiento sostenido.
[5] Muñoz Conde Manuel, “La Pobreza en 13 ciudades colombianas en 1985, según líneas de pobreza e indigencia” En: PNUD. Universidad de Antioquia. Marzo. 2005